sábado, 17 de septiembre de 2011

contreras libia

Plan de clases

Lugar: Normal Superior de Montería
Fecha: agosto de 2011.
Docente Cooperante: Julio Páez
Maestra en formación: Libia Elena Contreras Quintero
Grado: Preescolar
Área: Ciencias Naturales
Tema: Conozcamos los arboles
Estándar: Iniciar a los niños en el aprendizaje del árbol como parte de la naturaleza y beneficioso para todos los seres vivos.
Competencias: entorno vivo.
                         Entorno físico.
                         Relación ciencia tecnología y sociedad.
Logros: reconoce a los arboles como parte fundamental de la naturaleza que nos beneficia a todos los seres vivos.
Indicadores de logros:
  •  Fomentar un espacio donde los niños logren interiorizar que los árboles están conformados por un tallo, hojas, y algunos tienen frutos.
  • Manipular hojas y frutos y con su ayuda aprender diferentes conceptos y expresar sentimientos.
  • Percibir diferentes olores, sabores, texturas, formas y tamaños, por medio de los frutos y hojas.




Momentos de la clase

Actividades básicas cotidianas (A.B.C).
Organización del aula.
Saludos.
Llamado a lista.
Revisión del uniforme.
Recepción y socialización del compromiso anterior.
PRIMER MOMENTO:
Ambientación Psicológica: cuento sobre los arboles
Cuento
Hubo una vez un bosque de árboles pequeñitos que crecían todos a la vez. Había sido plantados por un anciano labrador que cuidaba de que todos crecieran rectos y sanos. Pero aquel lugar era un sitio de fuertes vientos, y los pequeños árboles preferían evitar las molestias del aire encogiéndose y torciendo sus troncos y ramitas.
El anciano, sabiendo que de aquella manera no podrían crecer bien, se esforzaba en enderezarlos, y dedicaba horas y horas a atar sus finos troncos a las estacas y varas que plantaba junto a cada árbol, con la esperanza de que comprendieran que hacía todo aquello por el bien de sus amados árboles.
Pero aquellos árboles caprichosos no tenían ganas de aguantar el viento. Daba igual que el viejo les prometiera que cuando fueran altos y rectos el aire no les molestaría. Siempre se las apañaban para doblarse y retorcerse, y seguir escondiéndose del viento. Sólo uno de aquellos árboles, uno que estaba situado justo en el centro del bosque, se esforzaba por seguir creciendo erguido, y aguantaba con paciencia las travesuras del fastidioso viento.
Pasaron los años, y el viejo murió. Y desde entonces, los árboles pudieron crecer a su aire, torciéndose y protegiéndose del viento como quisieron, sin que nadie les molestara. Todos, excepto aquel árbol del centro del bosque, que siguió decidido a crecer como debía hacerlo un árbol.
Pero a medida que el bosque crecía, y los árboles se hacían más gruesos y robustos, comenzaron a sentir crujidos en su interior. Sus ramas y sus troncos necesitaban seguir creciendo, pero los árboles estaban tan retorcidos que ese crecimiento imparable sólo les provocaba un dolor y sufrimiento aún mayor que el que se habían ahorrado evitando el viento. Cada día y cada noche, en lo profundo del bosque, podían escucharse los ruidos y chasquidos de los árboles, como si fueran quejidos y sollozos. Y en los alrededores comenzaron a conocer aquel lugar como el bosque de los lamentos.
Y era un lugar con un encanto especial, pues justo en el centro, rodeado de miles de árboles de poca altura, llenos de nudos y torceduras, se alzaba un impresionante árbol, largo y recto como ninguno. Y ese árbol, el único que nunca crujía, siguió creciendo y creciendo sin tener que preocuparse del siempre travieso viento y sus amigas las brisas.

Segundo momento
Desarrollo:
Se saldrá al patio y se observarán los árboles, luego, usando hojas de papel, colores, los niños dibujan de manera libre las hojas del árbol que más les gustó (colores, formas, tamaños etc.).
Se llevará los niños a recolectar hojas secas de diferentes tamaños y formas, se les entregará cartulina recortada en forma cuadrada o circular, y ellos, deben pegar las hojas secas en la cartulina hasta cubrir todo y así quedará un hermoso tapete o individual hecho con hojas secas.
Se les entregará a los niños materiales como palitos, hojas, pedacitos de tallo, con los cuales los niños van a formar la estructura de un árbol, partiendo de la vivencia que ya tienen de ellos.
Se recogerán algunos frutos, se degustarán, olerán y palparán, por último se realizará estampación de sellos con diferentes formas y tamaños, utilizando los frutos.

Tercer momento
Para dar por terminada la sección del día de hoy se le pedirá a los niños que hablen sobre los arboles que observaron durante el recorrido por el patio, se le mandara a comparar los dibujos que realizaron con los de otros compañeros y expongan las diferencias encontradas entre ellos.

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